Resulta curioso pensar cómo, en la actualidad y paradójicamente, los gestores de flotas parecen estar “malditos” con tal abundancia de extras y ventajas; nunca habían tenido acceso a tanta información, hasta el punto de poder llegar a sentirse casi ahogados entre tantos datos. Podríamos afirmar, entonces, que ahora el desafío sería cómo separar el trigo de la paja: centrarse en la información realmente necesaria, filtrando el ruido.  

Y, llegados a este punto, cabe preguntarse, entonces ¿En qué datos deberíamos centrarnos? 

Datos de siniestralidad: suena muy obvio tenerlo que incluir en la lista, pero no podemos ni debemos eludirlo, y no solo la cifra de accidentes y víctimas, también debe detallarse, como parte de este seguimiento, el registro del tipo de accidente, la causa, etc. Es un hecho que, si trabajamos con las métricas enumeradas a continuación, conseguiremos reducir el número de accidentes, en nuestra flota. 

Frenazos bruscos: si bien es cierto que, algunas veces, los frenazos bruscos pueden atribuirse a situaciones de emergencia, la verdad es que, en la mayoría de los casos, y más cuando se observan de forma frecuente, este tipo de, llamémoslos “incidentes con el freno”, suele indicar que el conductor no está respetando la distancia de seguridad con el vehículo que circula delante. Hay que señalar que este tipo de conducción es, precisamente, la que suele terminar en un alcance trasero.  

Velocidad inadecuada: uno de los mayores peligros potenciales para una flota es que los conductores no respeten los límites de velocidad o circulen con una velocidad inadecuada, por dos razones, la primera, porque la probabilidad de sufrir un accidente aumenta exponencialmente y, en segundo lugar, porque el gasto de combustible se dispara. 

Consumo de combustible: a menudo se pasa por alto, pero un consumo elevado de combustible suele ser una clara señal de malos hábitos al volante; puede ser una indicación de frenazos bruscos seguidos de rápidas aceleraciones o de velocidad y ralentí excesivos. La prevención de estos comportamientos da lugar no solo a una mayor seguridad, sino también a un importante ahorro en los costes de combustible. 

Salidas de carril: una de las causas más comunes de accidentes de tráfico es la salida de carril y, en muchos casos, conlleva consecuencias mortales. Los datos de siniestralidad de 2018 de la Dirección general de Tráfico (DGT) indican que los accidentes más comunes, tanto en las vías convencionales como en las de alta capacidad, han sido las salidas de la vía, llegando a representar el 40% de los siniestros. Este tipo de accidente de tráfico suele estar ligado a la fatiga o las distracciones o descuidos del conductor y representan un gran peligro, independientemente de la causa. 

Y llegados a este a punto, cabe preguntarse ¿cómo podemos analizar estos datos de siniestralidad? Uno de los métodos más eficientes consiste en combinar un sistema de prevención de accidentes con otro telemático. Un sistema de prevención de accidentes eficaz, como el de Mobileye, proporciona alertas y cuenta con otra serie de funciones, en tiempo real, para ayudar a los conductores a tener comportamientos seguros al volante. Entre estas funciones destaca la monitorización y alerta de distancia de seguridad, para advertir al conductor cuando se aproxima demasiado al vehículo que circula delante; la alerta de peatones y ciclistas, para alertar sobre un peligro potencial de atropello; la alerta de salida de carril, para advertir de un cambio de carril no señalizado y un indicador de límite de velocidad, que alerta al conductor cuando sobrepasa el límite de velocidad de la vía. 

 Al combinar estas funciones con un sistema telemático, no solo se logra prevenir accidentes de tráfico o alcances, sino que, a su vez, el gestor de flotas va a poder contar con datos claros y accesibles sobre el rendimiento del conductor. Y como ventaja adicional, cabe señalar que hay evidencias claras de que, solo con la instalación de esta tecnología de prevención de accidentes, la actitud de los conductores mejora hacia hábitos más seguros. 

Estos dato que recopilan los sistemas telemáticos pueden resultar también muy útiles para el gestor de flotas, a la hora de lograr una mejora del comportamiento de los conductores, si se utilizan para encontrar la manera de recompensar a aquellos profesionales, que circulan de forma más segura o cuya actitud al volante ha mejora significativamente. A su vez, los datos recopilados pueden señalar otra serie de problemas a sortear, como podría ser un área de la ciudad que resulte particularmente problemática y que tal vez debería evitarse. 

Descubra aquí cómo funciona un programa piloto y contacte con Mobileye para más información  

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